viernes, 29 de agosto de 2014

Creciendo

Fui creciendo con un "trauma" de infancia, en el que tuve que sufrir ese sin sabor de pasar por un abuso, donde viví en una finca, limpiando marranitos, ordeñando vacas, respirando ese aire del campo, lo menciono porque es desde esta etapa que recuerdo mi vida...

Crecí siendo la mayor, cuidando de mi hermano menor, mientras mis papas se ganaban la vida, vendiendo legumbres, todo para sacarnos adelante.

Crecí jugando carritos con mi hermano, jugando a la mama y al papa con mis amiguitas, viendo al Medellin, jugando futbol y montando triciclo.

Fui creciendo mientras estudiaba en un colegio de monjas, donde hacia mi mejor esfuerzo por ganar las materias, mientras en casa mis padres discutían, se peleaban y habían problemas por platas.

Fui creciendo sin figurar mucho en mi salón de clase, siendo una mas, no era linda y mas bien me considere siempre simple.

Fui creciendo con la ilusión de ser alguien mas, que la que ayudaba a sus papas a vender las legumbres y de cuyo trabajo me avergonzaba cuando estaba mas grande, prefería inventar historias que decir que mis papas vendían legumbres, mientras los papas y mamas de mis otras compañeras tenían oficios mas "dignos", "dignos", eso pensaba yo en ese entonces.

Crecí queriendo ser bonita, tener una mejor cara, mejor cabello y mejor cuerpo, pero siempre tenia que conformarme con mi cara larga, mis ojeras y mi cabello siempre recogido.

Mientras iba creciendo y terminando mi colegio, soñaba con entrar a la universidad y efectivamente lo logre, sin embargo no quise continuar en ella y me dedique a estudiar una técnica, o dos técnicas.

Seguía creciendo, pero cada vez con sueños mas ambiciosos, tener un trabajo, siempre quise trabajar en el Poblado (la zona play de Medellin), soñaba con viajar a todas partes, tener una pareja, independizarme, tener carro, casa y muchas cosas mas.

Y acá estoy, y acá sigo creciendo, suelo ser muy malagradecida y hasta pensar que no he conseguido nada, pero si haces un recuento de tu vida, te vas dando cuenta que pasito a pasito lo vas consiguiendo todo.

Ese trabajo que casualmente resulto ser en el Poblado, y que porque el Poblado, bueno este sitio te da una visión diferente de las casitas sin revocar, los carritos feos y la gente poco cortes que ves a diario, este sitio te da una visión diferente y eso es bueno, aprendí a valorar ese trabajo de mis padres, ese sufrido y muy digno trabajo que tuvieron mis padres para pagar mi colegio hasta poder finalizarlo, mi madre pagar mis técnicas hasta terminarlas y darme lo que tengo hoy, y mirarme hoy en la universidad intentando cambiar esa historia de las papas y las cebollas, tener una mejor calidad de vida y mejorar la de ellos que a la larga van mejorando con los años.

Acá sigo creciendo, con la esperanza de que así como en un tiempo soñé con un buen trabajo, en un buen lugar, una buena educación, una mejor figura entre otras cosas mas, pueda mas adelante seguir recogiendo los frutos de eso que poco a poco he ido sembrando, aunque a veces se me olvide por lo que he pasado y para donde voy.

(Después de todo crecer no es tan malo)

Eliiana García


lunes, 25 de agosto de 2014

¿A quien engaño?

Yo intento darme moral, intento escuchar a las personas, voy al psicólogo, leo libros, veo vídeos, para dizque subir el animo, la autoestima, cambiar la mentalidad, pero al final me encuentro con el mismo problema, semestre tras semestre, nada de esas materias me entra, nada, aunque pareciera estar muy atenta en clase, aunque pareciera entender, a quien engaño?, si no se por donde empezar los putos ejercicios, a quien engaño, si quizá en el fondo ya no quiero nada de esto que implique estudiar, a quien engaño si mi único propósito es graduarme para hacer mas dinero, para salir de esta miseria, ni siquiera es porque me guste, porque ya me harte de toda esta mierda.

Y si tengo rabia, y amo escribir con rabia, porque no me controlo, porque plasmo las cosas tal cual las siento, sin sutilezas, sin palabras rebuscadas, así como me sale y es que todo esto me sabe a mierda.

Aprovecha que tienes una novia ingeniera, decían, pero a quien engaño si no me aguanta, si ya no tiene la misma paciencia, si esos días en los que me insistía y me buscaba para estudiar se acabaron y todo por mi culpa, a quien engaño de sentirme positiva si estoy en lo mas profundo, dando patadas de ahogado, tratando de salir, pero cada semestre es hundirme un poco mas.

Y quizá escribir esto no va a arreglar mis problemas, como tampoco lo han arreglado ir al psicólogo, pensar positivo y sentarme a intentar hacer ejercicios, nada de eso sirve por que la mierda soy yo, la que no sirve soy yo y tendrían que cambiarme en cuerpo y alma para sacar algo bueno de mi.

Y que nadie venga a darme sus sermones de que !si se puede!, cuando nunca nadie estará en los zapatos de la otra persona, nunca, lo que para unos es fácil, para otros no, así de sencillo y es fácil hablar cuando ya lograste algo, que hablar cuando estas hundido.

¿A quien engaño?, a quien engaño, con eso del positivismos, de la buena energía , a quien?.. Si estoy harta!.

(así de sencillo!)

Eliiana García

domingo, 24 de agosto de 2014

Demostrar

Que difícil es esto de demostrar cuando nuestra mejor aliada es la distancia.

Llevo varios días siendo positiva, siendo optimista, tratando de ver que mas temprano que tarde las cosas van a estar a nuestro favor, que ya esperamos lo mas, podremos esperar lo menos.

Que hacer, cuando lo único que nos puede llenar son las palabras, en medio de toda esta distancia, donde no puedo decirte con una mirada que te quiero, donde no puedo suspirarte al oído, donde no puedo agarrar tu mano, apretarla fuerte, besarte, demostrarte... ¿Que hacer?, solo queda esperar y con unas cuantas palabras decir todo lo que quisiera hacer contigo, ¿y si me estoy cansando de esperar?, ¿y si ya no vale esto de las palabras?, ¿y si esa fuera la única forma de demostrar el amor?, ¿y si no se nada sobre el amor?, como mas se puede demostrar en la distancia, cuando la paciencia se agota y no sabes como mas hacer crecer una magia, hacer crecer un sentimiento y hacer feliz a alguien.

Supongo que ya ni me lees, tu no volviste a escribir en tu blog y nunca mas escuche un comentario sobre cada escrito que hago, supongo que yo también perdí la costumbre de pasarte el link de mis escritos, supongo que pasa el tiempo y uno esperaría que la persona vea lo que escribes, supongo y supongo, que perjudicial resulta suponer.

He pasado por días difíciles a pesar del optimismo, he pasado por días tristes y de soledad, he pasado por momentos en los que lo único que quisiera seria tenerla a mi lado, putos momentos que me destruyen el alma y el corazón, porque la paciencia por esperarla se me va al piso y comunicarnos resulta mas difícil, en este amor en el que pareciera que la única forma de demostrar algo es la comunicación, gracias a la distancia, a los mas de 500km que nos separan y a tantas obligaciones del tu por allá y yo por acá.

No se si aprenda a controlarme para no llegar a mis limites, no se si aprenda nuevas formas de demostrar y ya no se como hacer para demostrarle que la necesito tanto como puedo necesitar a Venus, a mi madre, la comida, la necesito tanto que hasta miedo tengo de que se entere de esta inmensa necesidad de ella, al fin y al cabo es una mortal mas, pero una mortal que necesito a mi lado para sentirme mas completa, mas alegre, mas viva y no se como demostrarle que todo este dolor, toda esta incertidumbre, todos esos malos ratos y malos días es por el hecho de que ella no este aquí...

O simplemente solo estoy siendo showcera y dramática, quizá ya no se demostrar nada y cada palabra es utilizada en mi contra.

(Y ya no se que hacer para darle estabilidad a este amor...)

Eliiana García

viernes, 22 de agosto de 2014

Viajar

Desde siempre viajar se ha convertido en una de las cosas que mas disfruto, incluso podría decir que si me gusta tanto la lectura es porque de cierta forma viajo...

Mis viajes eran cortos, a municipios a pueblos y alguna que otra vez a otro departamento, pero siempre los disfrutaba, incluso disfruto viajar de mi casa al trabajo, aunque me preocupe el hecho de que vaya a llegar tarde.

Si pudiera pasaría mi vida viajando y escribiendo, pero bueno ya saben, hay que estudiar, trabajar para luego poder viajar, o al menos en mi caso.

Desde que la conocí a ella, el gusto por viajar a incrementado y mas si es un viaje a Popayan y esa ciudad hermosa y antes desconocida para mi, quisiera todos los días dejar todo y simplemente viajar para encontrarme con ella, un avión, Cali, Popayan, o quizá decirle "nos vemos en algún otro lugar", pero viajar, cambiar, conocer, disfrutar.

Estoy a escasos días de viajar a Popayan y la espera se vuelve desesperante, el que espera desespera, dicen, y de por si soy desesperada, es el hecho de viajar, de cambiar, de ver el cielo desde el avión, las nubes como motitas de algodón, de sentir el susto cuando el avión arranca y la adrenalina cuando aterriza, de ver los paisajes, las carreteras, esa ciudad blanca, de verla a ella.

Viajar es una de las cosas que quisiera hacer todo el año, pero ya saben hay que trabajar, pero si espero que al año sea mínimo dos viajes largos y nuevos que realice, ella me lo ha dicho, también lo quiere y que mas dichoso que compartir el gusto de viajar con ella.

Viajar para sonreír, disfrutar, sentir olores y colores nuevos, perder la noción del tiempo, viajar tomando tu mano, viajar siempre a tu lado, viajar para estar a tu lado, viajar vivir.

(Mi lema cuando viajo sin ella, por ella o con ella ♥)

Eliiana García

miércoles, 20 de agosto de 2014

Ojeras

Creería yo que todos tenemos una parte del cuerpo con la que no estamos conformes, unos muy gordos, otros muy flacos, unos por bajos, otros por altos, unos quisieran tener mas nalgas, mas senos, la nariz perfecta, ojos claros... Yo, yo de cierta forma vivo conforme con mi cuerpo, me gusta mi estatura, me gusta mi contextura, ni muy flaca, ni muy gorda, mis senos no son grandes pero me gustan así, peques, me gustan mis pompis y aunque quisiera tener mejor abdomen o unas piernas mas tonificadas, en términos generales me gusta mi cuerpo, pero hay algo, un rasgo en especial por el que siempre me "quejo", aunque sea dentro de mi, mis ojeras...

No se cuantos remedios probé, cuantas cosas leí para curar las ojeras, papa rayada, manzanilla, corrector de ojeras, comidas, muchas cosas, pero ellas siguen ahí, hasta que yo con el paso de los días he aprendido a convivir con ellas y con el corrector de ojeras que no me puede faltar en el maquillaje, ellas están ahí, algunas veces mas pronunciadas que otras, oscuras, somo una sombra del alma.

Dice una imagen: "Las ojeras tienen historias que contar", y creo que las mías no serian una excepción, a parte de ser un poco de herencia, esa única herencia que podre tener ja!, pero que también tiene sus historias, sus desvelos, sus noches vacías, sus mañanas tediosas.

Hoy seria una de las cosas que quisiera corregir y eso implicaría corregir esas noches de lagrimas e insomnios, cuanto tiempo perdemos por alguien, por algo, por ideas absurdas, cuanto cansancio, cuanto desgaste, para que al pasar los años, solo lo  veas reflejado en tu rostro, cansado, ojeroso.

Lastimosamente para las personas que alguna vez me leerán, no, no tengo solución para las ojeras y sinceramente no se si la haya, pero solo puedo decir, que vale mas la pena descansar y tener el alma en paz, por que lo reflejaras en tus ojos y en tu sonrisa, que pasar noches de incertidumbre y a la mañana encontrarte triste, vacío y con ojeras.


Eliiana García

miércoles, 13 de agosto de 2014

Hermano

Hace algunos años pensé que haríamos muchas cosas juntos.

Uno a veces se hace ilusiones falsas, aunque ilusiones falsas es redundar mucho, ilusiones, son eso, solo ilusiones.

Siempre he sido una mujer que quiere muchas cosas y aspira a muchas cosas, aunque no tenga nada, quiza me la paso de ilusión en ilusión, de falsedad en falsedad.

A el lo veía como el único hombre que amaba, aun lo amo, pero la vida me mostró que hombres grandes e inteligentes hay muchos, y no hablo precisamente de mi papá, ni de mis compañeros de trabajo, mucho menos de amores o novios, hablo de muchos hombres que uno ve por ahí y admira.

Mi hermano tiene 21 años o 22 ya no se, no a terminado el bachillerato, vive con mis padres (al igual que yo), tiene una novia de dudosa procedencia (en realidad es porque no es que hablemos mucho o nos llevemos muy bien), y esta a escasos dos meses de ser papá.

Como nos cambia la vida, muchas veces lo he dicho, aunque pareciera que yo sigo en el mismo estado, muchas veces pensé en hacerme grande, tener dinero y vivir con mi hermano, comprarnos una moto o un carro, tener muchos videojuegos y pasarnos la vida jugando, riendo y compartiendo, ilusiones nada mas.

De esto solo me quedan las ganas de conseguirme una casa, un carro y muchos videojuegos aunque los tenga para mi sola, ¿que propósito tiene soñar tantas cosas con alguien que aspira a cosas diferentes?.

El se fue para Venezuela, se fue para el ejercito, aparentemente aun nos unían muchas cosas, sin embargo como nos cambia la vida, el, mi hombre, mi amor, mi hermano, simplemente cambio.

Mi vida es un desorden pero miro la de el y me parece peor, en que momento cambio tantas cosas?, quizá lo mejor de todo es que ahora el sea mas feliz y tenga mas cosas que yo, la bendición de un bebe supongo, algo que posiblemente yo no experimente, pero ahí esta el con sus cosas malas y buenas, viviendo lentamente su vida, construyéndola.

Y acá estoy yo, con el sinsabor de haber idealizado algo, alguien, a el, mi parcero, mi hombre, mi hermano, a veces me da guayabo, pero para eso escribo para sacarme un poco ese sinsabor, esa realidad y matar esa ilusión.

Que le vaya bien en su camino, que se ordene y sea un buen papá y que la vida le muestre el camino y no llegue a arrepentirse de sus decisiones y actos, después de todo es mi hermano y que Dios lo bendiga.

(Lo que me quedo... "Porque aunque seamos tan diferentes, somos el uno para el otro, y aunque tomemos rumbos diferentes, SIEMPRE estaremos unidos")

Eliiana García


lunes, 11 de agosto de 2014

Esa noche

La pasión es lo que mueve al mundo, somos mas felices y completos cuando hacemos algo que nos apasiona.

He estado pensando que no me puede faltar la pasión con ella, en esta relación y mas sabiendo todo lo difícil que ha sido.

Esa noche sabia que estaría con ella, estábamos cansadas, ella había tenido un largo viaje, yo esperaba ansiosa por ella, y celebraríamos mi cumpleaños.

La noche llego con mucha magia, un reencuentro, algo de baile y unas copas. Ahí estaba ella hermosa con su sonrisa y su mirada tierna, con su cuerpo, bailando conmigo, besándonos, acercándonos.

Esa noche la recuerdo con cierto cariño, porque fue acá en mi ciudad, porque hicimos el amor lento y rápido, seguramente antes he escrito sobre esa noche, pero hoy quise volver a plasmar con letras, cada beso, cada caricia, cada sonrisa, cada gemido, cada palabra de esa noche.

Después del baile y unas copas, estábamos ahí en la oscuridad de la habitación, frente a frente, sintiendo nuestros cuerpos y nuestras ganas, yo la besaba suavemente mientras ella estaba contra la pared, ahí la desnude, le quite toda su ropa, bese su cuello, sus senos, sentí su humedad, la sentí tan mía y yo solo me sentía de ella.

Entre beso y caricias, terminamos en la cama, acariciándonos y besándonos con mas pasión, sintiendo nuestra respiración, nuestro calor, nuestra humedad, cansadas del largo día, terminamos abrazadas, con nuestros cuerpos desnudos y las almas felices por esa noche que aun llevo grabada en mi.

(26-Jul-2013)

Eliiana García