domingo, 8 de julio de 2018

Lo que tanto pedí, lo que tanto escribí

Casi nunca re leo mis entradas, pero si se mas o menos lo que escribo, recuerdo por ejemplo que muchas veces escribi que queria y merecia un amor bonito, que era demasiado emocional y especial, y que queria y necesitaba en mi vida algo lindo, especial, fuerte.

La vida me ha regalado varios momentos, personas, relaciones y situaciones muy especiales, pero hasta el día de hoy todas fallidas, por mi culpa, por la culpa de los demás, por situaciones externas o lo que sea, fallaron, se acabaron, rompí y me rompieron, pero lo que siento hoy lo que me pasa hoy, ha valido cada segundo de tristeza, decepción, desamor, desilusión que he pasado.

Esto no se parece a nada de lo que viví antes, sentir que te aman tanto, con el alma, con dedicación, esfuerzo, tiempo y un montón de cosas, simplemente es maravilloso (maravilloso es una palabra cualquiera porque no se ni como definirlo)... Inefable.

Siempre he creído en el poder de la palabra y los pensamientos, lo que uno quiere, si lo piensa, si lo sueña, si lo visualiza, se puede hacer realidad y creo que de tanto soñar con un amor bonito, por fin me llego, tengo miedo de perderle, obvio, pero es mas la tranquilidad y "disfruta el momento", que cualquier otra cosa, cualquier duda, cualquier incertidumbre, es como sentir el amor bonito en todo su esplendor, es como la mezcla de todos los amores anteriores en uno solo, es como perfecto, completo, en medio de tanta imperfección, incompatibilidad y complicadez, ella es el amor.

Seguramente se va a ir, así como otros amores ya se fueron, o quizá cuento con suerte y no se vaya, pero lo que si se es que me hace sentir algo muy diferente, algo muy fuerte, algo muy especial, yo que pensaba que me había enamorado, llego ella a pintarme el alma y el corazón de un amor diferente. Y fue lo que tanto pedí a Dios, lo que tantas veces soñé, lo que tantas veces escribí que quería... Ella hoy lo es.


Eliiana Garcia