Después de esos 5 años experimente cosas que me hicieron madurar y entender, queme muchas etapas de mi vida, pero no volví a sentir esas sensaciones en mi ser, hasta hace poco...
Ella se presento a mi vida de una manera muy sutil, compañera de fútbol, la vi sin mirarla, pero ahí estuvo durante un año, hasta que como se dice coloquialmente se volteo la torta, termine una relación dañina en la que estaba, después de mucho intentar y luchar pude safarme de ahí, no fue fácil, a veces no lo es, pero se hizo, tuve la oportunidad de viajar y encontrarme con cosas muy mías y tuve la grandiosa oportunidad de conocerla a ella, hace cuanto no escribo en nombre del amor?, todo este tiempo ha sido sobre extrañar, sobre dolores, rabias, tristezas y sin sabores y hoy, hoy puedo sentir que la vida me sonríe de esa forma bonita, natural y sincera, de esa forma donde suspiras, sientes corrientazos en el estomago y te imaginas con alguien mas, en una relación basada en confianza, respeto, cariño, deseo, así como siempre me han gustado las relaciones, ella llego, sin buscarla, sin buscar nada, como pasan las mejores cosas en la vida.
Y acá estoy escribiendo de esta bonita sensación que es amar, enamorarse, gustar, desear, y querer bonito y con el alma, pensando que Dios de una u otra forma siempre tiene algo bonito para mi, desvocandome de nuevo a pesar de las veces que he sufrido, porque cuando se ama se sufre, pero si no se ama te enfermas, es el riesgo que quiero correr, ahora un poco mas madura y entendida de todas las cosas que suceden en nombre del amor, de todas esas cosas que influyen en una relación, pensando que te quiero y que sere para ti y seras para mi, el tiempo que Dios considere necesario, ahí estaré, queriéndote, cuidándote y aprendiéndote... Sintiendo de nuevo todo esto tan lindo que llamamos amor.
Eliiana Garcia