miércoles, 24 de mayo de 2017

Amistad

Creo que la ultima vez que hable o creí en la amistad, tenia como 15 años y estaba cursando mis últimos dos años del colegio, tenia las "mejores" amigas y también hacia lo que fuera por ellas, solo con el tiempo me di cuenta que así como en el amor, a veces la amistad suele ser de una sola persona.

Anoche fue una noche de muchos acontecimientos, me estoy convirtiendo en algo que no soy y no me gusta ser, pero bueno a parte de eso y de que hable con Alejandra mucho rato o mas bien ella me hablo de sus amores y de lo linda que puede ser su nuevo amor, mientras yo escuchaba, algo dentro de mi arrugaba y apretaba mi corazón, que estupidez! jajaja, eso no sucede, nadie tiene una mano adentro estripandole el corazón!, que cursi soy a veces, el punto es que llore mucho y sentí un montón de cosas, pero lo mejor de todo es que ese no es el punto de este escrito, fue una NOCHESOTA en todos los sentidos, hacia mucho no lloraba tanto y peor aun hacia mucho no tenia tantos pensamientos diferentes en mi cabeza, pero volvamos al punto, la amistad.

Estando en 11 tuve mi primera gran tristeza, dejar mis amigas del colegio, creo que valió la pena sentirme tan triste, porque al fin y al cabo, terminando 11, termino toda esa amistad y esa ilusión de amigas, nunca mas volví a saber de ellas, nunca mas se interesaron en mi, ni una llamada, ni una salida, esa mona, esa chica de nombre extraño que tanto quise, apoye, acompañe e hice reir, se habían quedado ahí en esas paredes de los salones.

Anoche después de 12 años aproximadamente vi a los ojos a la "mona" la que por dos años acompañe, aguante, escuche, llore, abrace y quise con el alma en esas paredes de salones, la que después de todo eso nunca se intereso por saber de mi, nunca me llamo, nunca apareció y fue como sentir que ese amor o esa amistad se quedo en esos salones, la mire, los mismos ojos verdes, un poco mas gorda y mas vieja, pero los mismos ojos, sonreí al verla y quise abrazarla con todas mis fuerzas, a cambio solo recibí una escuálida sonrisa y un leve abrazo, esa que me pedía que le abrazara, que hasta picos me pedía y que nada de eso le fue negado, ayer fue tan simple y fría como la ausencia de amistad por estos años.

He perdido la cuenta de cuantas veces he soñado con ella, quizá porque una parte muy en el fondo de mi la extraña o extraña a esa persona de los salones, pero lo de anoche fue simplemente el gesto mas frio y real que hay, no fue amistad, solo lo fue en mi ser y el pasado pasado esta, y se quedo alla, esta necesidad de vivir en ese pasado, esta melancolía y estos recuerdos no me dejan, no me dejan carajo!, no me dejan avanzar, porque todo tiempo pasado fue mejor y hasta en mis sueños intento quedarme ahí.

Quiza como decía mi mama: "amigos no hay!".

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