lunes, 6 de febrero de 2017

Continuar

Realmente no recuerdo cuantas veces me ha tocado replantear mi vida, lo que hago, lo que quiero, a quien quiero y para donde voy.

Hay una frase que dice algo como "uno siempre cambia el amor de su vida por otro amor o por otra vida", y creo que eso lo he hecho ya un par de veces, he cambiado por otros amores y alguna vez cambie por otra vida y acá vuelvo a comenzar.

No ha sido fácil, estos días no han sido fáciles, pero ha sido una bonita oportunidad de estar conmigo, y de cargar el peso de muchas cosas y saberlas llevar con dignidad, de ir depurando, el hecho es que me he pasado días pensando en las mismas cosas, en los mismos errores, en las mismas tristezas, en las mismas personas, en el mismo pasado y mientras muchos avanzan yo que estaba estancada ahora no solo estoy estancada sino que camino para atrás y no ha sido fácil asimilar un montón de decisiones, errores, palabras, actos, pero es lo que hay.

A veces me levanto pensando que me va a escribir, que me va a saludar, y me va a decir, que me ama mas que a nadie, que me perdona, que me quiere de vuelta, que quiere que lo intentemos, que no deja de pensarme, y entonces miro el whatsapp y veo como la mayoría del tiempo esta en linea y no precisamente diciéndome esas cosas, quizá alguien mas roba su tiempo, quizá no y yo parezco psicópata viendo su maldito "on line" cada 30 minutos, luego pienso también que mejor que ni me hable porque seguramente su rencor, orgullo o lo que sea, va a decirme que soy una culiadora, egoista, descarada, que soy lo peor que pudo pasarle, que me odia, me la lastime y esas cosas, entonces respiro profundo y me digo, bueno no me busca para decirme ni en la mas remota posibilidad lo primero, pero por lo menos tampoco esta diciéndome lo segundo.

Y vuelvo a empezar en ese proceso de soltar, perdonarme y continuar, pero así se ha pasado todo este año con los mismos deseos de que me perdone y me busque, de que muera por mi, pero a la vez de que no me odie tanto y no venga con sus duras palabras, así ha sido todo el año, solo que este ultimo mes, lo he pasado desde la soledad, haciendo una retrospectiva de mi y de todo lo que hice, de saber que fui cruel y descarada, pero de que, ¡carajo!, me equivoque, no merezco un perdon? o una maldita oportunidad?, pues no, esas cosas no se perdonan por estos tiempos y sentir que a pesar de mi debilidad, de que también sufrí y me sentí mal, pues fue lo peor que pude hacer y me debato entre justificarme y reprocharme, entre perdonarme y odiarme, entre entender porque termine y desear que muera por mi y se me hace el nudo en la garganta por no llorar.

Hoy es un día que decidí escribir, porque es un día que decido continuar aunque se que lo futuros meses van a ser de la misma sensación, pero mientras estén las fuerzas de continuar peleare con ese va y viene, hasta que quizá en algún momento de tanto luchar contra eso, pueda liberar, pueda sonreír, ya he estado en situaciones similares y he logrado salir de ahí, y aunque esta vez a sido tan difícil, tan intenso, confió en que también saldré de ahí, mientras tanto no quiero pasarme mas años en la misma situación. Necesito perdonarme, necesito aceptar y CONTINUAR.

Eliiana García

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